Los desodorantes y los antitranspirantes son productos de higiene personal que ayudan a controlar el olor corporal y la sudoración, respectivamente. Y es que, aunque normalmente las funciones vitales de tu cuerpo trabajan de manera óptima si se encuentran a una temperatura de alrededor de 37 ºC, cuando el cuerpo se calienta por el motivo que sea (p. ej., altas temperaturas, ejercicio físico, fiebre, etc.), la zona de nuestro cerebro que controla la temperatura, llamada hipotálamo, envía un mensaje al cuerpo dando la orden de sudar, con la intención de conseguir enfriarse y de mantener un equilibrio entre la ganancia y la pérdida de calor, proceso conocido como termorregulación.
¿QUIERES SABER QUÉ ES EXACTAMENTE EL SUDOR Y POR QUÉ SUDAMOS?
Sin embargo, no todos sudamos de la misma manera. La composición del sudor varía dependiendo de diversos factores: hidratación, temperatura ambiental y corporal, actividad física y región corporal en la que se produce. Esta variación nos puede generar dudas sobre qué tratamiento es el que más se ajusta a nuestra situación o cuál nos puede resultar más eficaz. En esta entrada del blog, te resolvemos estas dudas y te contaremos las principales diferencias entre un desodorante y un antitranspirante, y en qué situaciones se recomienda utilizarlos.
Recuerda que el sudor, un líquido transparente formado por agua, urea, colesterol, sales y grasas, principalmente, en sí mismo, no huele, pero, puesto que es húmedo, rico en nutrientes y muy cálido, se convierte en el medio ideal para la flora bacteriana corporal y que, precisamente, son estas bacterias las que causa el mal olor corporal. Además, en el caso de las axilas, la presencia de ácidos grasos y proteínas aumenta la intensidad del olor en esta zona.
CONOCE MEJOR POR QUÉ HUELE MAL EL SUDOR
Los desodorantes se distinguen de los antitranspirantes porque primordialmente eliminan el olor a través de sus agentes antimicrobianos. Entre sus principales características encontramos que:
- Enmascaran el olor corporal y ofrecen sensación de frescor.
- Presentan un efecto antimicrobiano, al reducir el número de bacterias y los productos de descomposición responsables de la producción de sustancias encargadas del mal olor corporal.
- Suelen presentar, entre su composición, una fragancia, con la finalidad de desprender un buen olor corporal.
- Tienen un uso focalizado en axilas y pies.
- Fijan y eliminan el agua, los gérmenes, los metabolitos y otros productos que potencian la bromhidrosis.
- Mantienen su efecto durante 8-12 horas, por lo que puedes utilizarlo de manera diaria.
- Se aconseja aplicarlos sobre la piel limpia.
¿HAS OÍDO HABLAR ANTES DE LA BROMHIDROSIS?
Los desodorantes ayudan a controlar el crecimiento de las bacterias, pero permiten la transpiración. Por lo tanto, disminuirán o eliminarán tu olor corporal, pero no evitarán que sigas secretando sudor.
Los desodorantes son adecuados si tienes una sudoración normal y quieres una ayuda para disminuir el olor corporal. Sin embargo, si padeces una sudoración excesiva, te recomendamos que te inclines por los antitranspirantes.
Antitranspirantes
Los antitranspirantes bloquean los conductos de las glándulas sudoríparas gracias a la creación de una barrera gelatinosa, producto de la reacción de su principio activo con el agua del sudor, que acaba impidiendo la salida del sudor y el posible mal olor.
Los antitranspirantes controlan el sudor y el olor corporal de dos maneras distintas: por una parte, previenen que la sudoración llegue a la superficie de la piel y, por otra, reducen el número de bacterias que causan el mal olor gracias a sus agentes antimicrobianos.
Como principales particularidades de los antimicrobianos, encontramos que:
- Tienen un efecto duradero, de entre 24-48 horas, por lo que sólo tendrás que aplicarlo de 3 a 4 veces por semana.
- Reducen el sudor en un 82%.
- Tienen un uso generalizado por todo el cuerpo.
- Se aconseja aplicarlos por la noche, antes de acostarse, con la piel totalmente seca.
Los antitranspirantes son adecuados si padeces una sudoración excesiva, potente, así como en casos de hiperhidrosis.
Los antitranspirantes pueden encontrarse en distintos formatos (gel, toallitas, polvos, spray, roll-on, etc.), que pueden satisfacer a unas necesidades diferentes, además de adecuarse a cada zona específica del cuerpo.
Desodorantes y antitranspirantes para hombres y mujeres
El mercado está lleno de productos para controlar la sudoración y el mal olor corporal para hombres y otros para mujeres. Sin embargo, si bien es cierto que las mujeres presentan más glándulas sudoríparas individuales y que ellos, incluso con un menor número de glándulas, producen una mayor cantidad de sudor, ninguno de los dos factores afecta la forma de actuación de desodorantes y antitranspirantes. La fragancia, más dulce y sutil en los productos para mujeres, e intensa y maderada en los productos para hombres, y el precio, más elevado, normalmente, en los productos femeninos, son las únicas diferencias.
Desodorantes naturales
Si tienes la piel sensible, si acabas de depilarte o si sufres de alergias cutáneas, quizá pueda interesarte optar por alternativas orgánicas. La piedra de alumbre, los productos hechos con ingredientes naturales y la mezcla de limón y bicarbonato podrían ser algunas opciones de desodorantes naturales.
Por último, permítenos que te demos un consejo. Si ni los desodorantes ni los antitranspirantes te resultan efectivos, pregunta a un especialista por otras opciones terapéuticas, tales como la iontoforesis, la toxina botulínica u otros tratamientos, como el láser o la radiofrecuencia, según la zona a tratar. ¡No dejes que el sudor o el mal olor corporal condicionen tu vida!